viernes, 8 de octubre de 2010

Por qué cuidar la gestión de la reputación online

En el OMExpo 2010 de Madrid, el pasado 25 de ferbrero, tuve la suerte de participar en una mesa redonda junto con los chicos de trnd.es, i’Move e Incipy. El tema a tratar, la gestión de la reputación online. Dividimos la sesión en tres partes:
  • Conceptualización general sobre gestión de la reputación.
  • Razones por las que gestionar tu reputación en Internet. Casos prácticos.
  • Cómo gestionar la reputación online de tu empresa.
Javier Godoy abordó la primera, yo la segunda y Peré Rosales la tercera parte.
Mi breve exposición intentó dar 10 razones por las que es imprescindible cuidar la gestión de tu reputación. Aquí os dejo la presentación.



Un artículo deChema Martinez

jueves, 7 de octubre de 2010

El primer paso hacia el éxito

La importancia de la planificación es hoy por hoy indiscutible ya que es una de las políticas estratégicas fundamentales para alcanzar objetivos futuros. Aún así no siempre tenemos claro por dónde empezar y qué pasos seguir para alcanzar nuestras metas.

Imaginen a un futbolista que desea triunfar. Es capaz de visualizarse en un gran estadio marcando goles increíbles y sintiendo el calor del público. Resulta una visión que le llena de emoción y ganas por conseguirlo. ¿Alguna vez se ha imaginado logrando el éxito? Si es así puede que haya sentido cómo dicho deseo se torna en frustración cuando no sabe la manera de lograrlo. ¿Estas caminando en la dirección correcta? Hay dos herramientas que me parecen interesantes para evitar esta duda.

Siguiendo el símil futbolístico algunos pensaran que para lograr el éxito deben seguir el camino de sus ídolos pero esto no siempre es sinónimo de éxito. Las circunstancias nunca son las mismas. ¿Por qué no escribir nuestra propia ruta? Quizás por no saber cómo hacerlo. Tenemos que ser conscientes de las herramientas de planificación existentes y de que aunque la sensación de éxito siempre es la misma la forma de lograrlo difiere notablemente. (De hecho las diferencias son las que nos hacen especiales y nos aseguran un buen porvenir).

No nos equivoquemos, el éxito empresarial es distinto al deportivo (individual). La planificación no sigue la misma pauta principalmente por la necesidad de “coordinación”. En ambos casos un análisis DAFO es una herramienta importante pero hoy quiero hablar de otros útiles.

Existen dos herramientas que personalmente me parecen indispensables para la realización de una planificación efectiva y trasparente pero también soy consciente de lo poco que se utiliza en las empresas. Seamos sinceros: seguimos llevándonos por la improvisación y pensamos que la adaptación a circunstancias cambiantes es tan importante como lo es en la teoría de la evolución. Lejos de querer contradecir esto lo que pretendo es decir que una cosa no está enfrentada con la otra: Adaptarnos a cambios sin una planificación nos puede hacer perder el rumbo.

El CPM (Critical Path Method o Método de la Ruta Crítica de la corporación DuPont ) junto con los diagramas de Gantt son herramientas muy visuales y esclarecedoras que nos ayudarán a ver el futuro no solo como una meta sino como una consecución de pasos y plazos que nos acompañarán hasta el éxito. Esto se basa en determinar los pasos intermedios para lograr un fin calculando el tiempo de consecución de cada uno y descubriendo de qué otros procesos depende así como a qué departamentos afecta, qué medios se verán comprometidos, la formación necesaria, redimensionamiento de plantillas etc… Toda esta información plasmada en un diagrama de Gantt nos mostrará gráficamente el camino y con el cálculo del CPM obtendremos los procesos críticos que debemos controlar con especial atención para cumplir plazos y establecer márgenes.

Con la confección correcta del plan la frustración podrá ser convertida la ilusión pues sabremos por dónde estamos caminando sin perder nuestro objetivo de vista. De igual modo (gracias al sistema de comunicación interna necesario para la confección del plan) supone el compromiso de todas las partes implicadas.

Existen herramientas informáticas destinadas a facilitar la planificación como podría ser el Gantt Proyect o Gantter.com (gratuitas) y otras para CPM pero no es complicado realizarlo a mano o mediante hojas de cálculo a no ser que se trate de un objetivo a muy largo plazo o que implique una ramificación difícil de controlar. Viendo el camino que hay por delante, podemos centrarnos en jugar el partido de hoy.

En Pymes y Autónomos

miércoles, 6 de octubre de 2010

El Egosumer

Ser consumidor no es mas que una faceta de las múltiples que tiene una persona. Cuando analizamos a las personas agrupándolas según su perfil como consumidor, obviamos otros aspectos importantes que, a mi parecer, deberían tenerse en cuenta, como la enorme adaptabilidad que tiene el ser humano. Con ello simplemente quiero ilustrar la adaptación que ha hecho el usuario de la web 2.0, haciéndola virtualmente suya.


La web 2.0 es por definición del usuario. En la web 2.0 ha encontrado el usuario un lugar donde no es necesario ser profesional, o erudito en nada, para poder opinar sobre algo. De hecho, en la web 2.0 existe el meta-valor de que nadie tiene que ser experto en nada, ya que en la propia red se encuentra todo el conocimiento. Este culto al aficionado, al no profesional, a que cualquiera puede opinar, no es mas que pura autocomplacencia y masturbación intelectual. Esta recuperación del ser, del yo, del hedonismo por encima de la propia necesidad de consumir por status, ha creado lo que algunos ya denominan como consumidor de tercer tipo, o egosumer.

El egosumer conoce el valor y el poder que la marca le ha otorgado dentro del marco 2.0, y lo va a utilizar en su beneficio. Es un incansable consumidor de experiencias, de entretenimiento en la red. Lo que ahora le entretiene, mañana le aburre. De la misma manera, es incapaz de establecer vínculos duraderos con las marcas. Es tremendamente infiel a éstas, ya que ha vuelto a valorar el producto, comparando y eligiendo, antes de realizar la acción de compra. Cuando una marca se expone en los Social-Media, el egosumer sabe que puede exigirle algo a cambio por formar parte de su comunidad. Sabe que su afiliación no es gratuita, y le pedirá a la marca algún tipo de beneficio como descuentos, promociones, etc. También ve a las marcas como parte consustancial del sistema económico que nos ha llevado a la crisis, teniendo por ello un cierto recelo hacia ellas.

En definitiva, el egosumer es un tipo de consumidor que ha perdido completamente la inocencia, que está bien informado, y que conoce el poder que tiene en la red como usuario. La crisis no ha sido más que un acelerador del proceso de adaptación que ha sufrido, pero no ha sido un factor determinante.
Creo que es interesante valorar estos aspectos, ya que en una conversación entre una marca y un usuario, el riesgo que exponen ambos no está proporcionado. La marca tiene mucho que perder, el usuario no. Hay que definir todavía muchas cosas para que no pierda nunca la marca el control sobre su mensaje, ya que este es un reto a los que los Community Managers se enfrentan casi a diario.

Un artículo publicado en Marketing Comunidad

martes, 5 de octubre de 2010

¿Quién es el dueño de tu imagen?

Esta semana estuve en Fundesem (Alicante) hablando de mis cosas a un grupo de profesores de la escuela. Como allí me siento como en casa y había buen rollito, pudimos debatir abiertamente. Logicamente había varios profesionales de R2H2 y en un momento hablamos de una situación que hasta hace poco no se solía plantear. Se trata del derecho de los profesionales por cuenta ajena para diseñar una estrategia de visibilidad y posicionamiento.

Ya sabemos que una gran mayoría de empresas impide o ponen todo tipo de dificultades a los “empleados” para que utilicen La Red en el trabajo. Eso lo puedo entender pero no compartir.

Lo que no me parece ni lógico, ni ético y posiblemente tampoco legal, es que una organización prohiba a sus profesionales darse a conocer cuando están fuera de su jornada laboral.

Un profesional que quiera desarrollarse, no puede quedarse dormido. Eso es algo que llevo diciendo aquí desde hace años. Si quiere aumentar su valor, debe diseñar una estrategia de Branding Personal para ocupar un lugar preferente en la mente de quienes le rodean.

Si eres un buen profesional y te has “currado” tu Marca Personal hasta conseguir ser conocido y reconocido como un referente, tu valor aumenta. Si eliminas una de las partes de la ecuación, la profesionalidad o la visibilidad, tu valor disminuye enormemente.

El problema surge cuando una compañía te prohibe, implícita o explícitamente, que utilices canales para promocionar tu trabajo. Aquí hablo de Internet, pero también de dar charlas, clases en escuelas de negocios, escribir artículos, asistir a eventos de networking, escribir un blog o cualquier otra forma de salir de la burbuja empresarial.

Por supuesto, no estoy hablando de utilizar información confidencial o aprovecharse de los recursos de la organización en la que trabajas.

Si los profesionales, independientemente de nuestro estatus, pensamos como empresas que ofrecemos servicios, no tiene ningún sentido que otra empresa, la que te paga por tu trabajo, te meta en un zulo y te impida que otros sepan lo bueno que eres.

Cuando te pagan una nómina, ¿Te pagan por un trabajo o también te quiere “en casa y con la pata quebrada”? ¿Hasta que punto una empresa posee tus “derechos de imagen”?

En varias de las empresas de diferentes sectores en los que he trabajado, he sido responsable de producción de lo que se denominan, maquiladores o “copackers”. Se trata de empresas independientes que fabrican tus productos. Casi todas ellas fabricaban para otros clientes y tenían sus propias estrategias de marketing. Si queríamos exclusividad, debíamos pagar un precio extra y firmar un contrato de varios años.

Si los profesionales somos como esos maquiladores, y vendemos nuestro trabajo, debemos esperar que se nos pague por ello. Pero no tiene sentido que se nos impida, mientras tanto, mantener y aumentar nuestra reputación profesional.

Una de las personas de la jornada en Alicante me decía que la experiencia adquirida por una persona en una empresa, pertenece a la empresa. Pero yo no puedo estar de acuerdo de ningún modo. Si eso fuese así, una organización también debería pagarte más por lo que aprendes fuera de ella y luego aplicas en tu trabajo mientras ocupas ese puesto.

Cuando eres conocido, es más facil que encuentres otro empleo o que paguen más por lo que haces. Eso tiene un efecto directo sobre tu vida y tu profesión. Si te impiden que te conozcan y no has llegado a un acuerdo previo, te están robando, directamente. Están quitándote algo que te pertenece.

Además, me parece muy miope esa postura a la defensiva que considera que el hecho de que un profesional tenga una Marca Personal fuerte solo le beneficia a él o a ella. Si realmente, quienes dirigen las empresas tuviesen dos dedos de frente, estarían aprovechando la reputación de esa minoría de profesionales para potenciar la marca corporativa.

Por lo tanto, si no hay nada escrito, nadie debería impedirte posicionarte como un profesional con Marca Personal. Nadie tiene derecho a manejar tu vida y tu reputación fuera del horario de trabajo. Y si empiezan a incluir claúsulas en las que aparezcan estos asuntos, haz números y calcula cuanto va a costarte esa perdida de notoriedad.

Cuando tengas 35, 45 o 55 años y te digan que pases a por el finiquito, nadie te va a pedir disculpas ni te va a compensar por haberte mantenido en la sombra.

Andrés Perez Ortega

lunes, 4 de octubre de 2010

El valor de la diferencia

Frente a los numerosos empresarios que eligen hacer del precio más bajo su mayor argumento de ventas se encuentran algunos innovadores que apuestan por la diferencia. Y ganan.




Para muestra basta un botón: en el primer semestre de 2.010, Nokia, Samsung y LG vendieron 400 millones de teléfonos móviles, frente a los solo 17 millones de Apple.

Sin embargo, Apple se llevó el 39% de las ganancias del sector, un 32% más que Nokia, Samsung y LG juntas.

Una razón más para seguir el viejo slogan de Apple: Think Different, es decir, Piensa Diferente.

Fuente: Fortune. Un artículo publicado en El Secreto de las Pymes que crecen.